«No he tenido el valor. No he podido ser lo que quería. No he podido ser un cristiano.»
Jaime Ceballos está al final de su adolescencia; pronto deberá decidir el rumbo que tomará su vida. Por lo pronto, su percepción del mundo es que no tiene lugar definido en él. Quiere ser puro, pero su sangre hierve. Se debate entre la moral cristiana y los impulsos físicos de su ardiente juventud; entre la jerarquía familiar y sus ansias de independencia; entre su pequeño mundo de pueblo chico y el horizonte infinito que vislumbra; entre el pecado y la salvación. La vida, entonces, pone a Jaime ante verdades desnudas que lo harán cambiar radicalmente.
Desde su primera edición en 1959, Las buenas conciencias es una de las novelas más leídas de Carlos Fuentes.